La pérdida de uno o varios dientes suele ser motivo de preocupación en nuestros pacientes. Y si bien existen los implantes dentales para paliar estos problemas, la odontología moderna tiene que enfocarse en la prevención para evitar llegar a la extracción dental. Pero ¿cuáles son las principales causas de pérdida de dientes? Nos encontramos principalmente con tres causas: la caries, la enfermedad periodontal y el bruxismo.
1. La caries
La caries es una enfermedad dental que afecta por igual a hombres, mujeres y diferentes grupos de edad. La desmineralización del esmalte del diente por bacterias (Streptococcus mutans) produce su debilitamiento y se asocia a infecciones en las raíces, fracturas y abscesos que llevan a la extracción dental.
¿A quiénes les afecta y cómo remediarlo?
- En la población infantil la caries es muy frecuente causada por malos hábitos dietéticos y la mala técnica de cepillado. Es importante en los niños evitar el consumo de caramelos, zumos azucarados, eliminar el biberón por la noche cuando ya tienen dientes, supervisar la limpieza dental ayudándoles en el cepillado y acudir una vez al año al dentista para aplicar flúor si es necesario y diagnosticar precozmente las caries. Los sellados de fosas y fisuras pueden ser muy útiles a esta edad.
- Un grupo posible de riesgo en caries son los deportistas, el ejercicio físico produce una disminución de la saliva, que es un protector natural que lubrifica la boca, diluye los azúcares y regula el pH. Además, normalmente los deportistas asocian a su ejercicio las bebidas isotónicas y azucaradas. La combinación de este mayor aporte de azúcares junto con poca producción de saliva aumenta mucho el índice de caries interproximales (entre los dientes). En este caso, es importante mantener un dieta que les permita seguir con su actividad sin ser alta en azúcar.
- Otro grupo de alto riego de caries que son los pacientes que tienen empastes o reconstrucciones antiguas, coronas dentales mal adaptadas, con escalones y filtraciones. Las caries debajo de un tratamiento dental antiguo son más difíciles de diagnosticar, por ello, en estos casos es importante realizar radiografías periapicales anualmente para evitar perder los dientes por grandes caries.
2. La periodontitis
La enfermedad periodontal empieza a ser más prevalente a partir de los 40 años. Es una enfermedad infecciosa, causada por la placa bacteriana de la boca, y cursa con inflamación gingival, sangrado de encías, mal aliento, retracción de las encías y movilidad dental.
Existen un grupo de bacterias orales muy agresivas para las encías, son bacterias anaerobias que se esconden por debajo de los tejidos que sujetan el diente. Estas bacterias (Porphiromonas gingivalis, Prevotella intermedia, Actinomycetem comitans, entre otras) se esconden por debajo de la encía, separándola del diente y forma lo que llamamos Biofilm. En este biofilm se producen toxinas negativas que destruyen el hueso y la encía que sujetan a los dientes y como consecuencia se aflojan, se mueven y se caen.
¿Cómo evitar la pérdida dental por periodontitis?
El periodoncista (dentista especialista en encías) determinará el tratamiento más adecuado, que en la mayoría de ocasiones consiste en remover de manera cuidadosa las bacterias adheridas a la raíz del diente y posterior mente mantener una buena higiene oral junto con un programa de mantenimientos periodontales específico.
3. El bruxismo
El bruxismo es otra causa de pérdida de dientes. De manera inconsciente por la noche o por el día se ejercen fuerzas de apretamiento en los dientes para liberar estrés y cansancio. Este hábito involuntario mantenido en el tiempo causa fisuras y fracturas de los dientes. Y si bien controlar el bruxismo no es fácil, sí existen técnicas para contrarrestar la fuerza ejercida sobre los dientes, las encías, la musculatura de la masticación y la articulación temporomandibular.
¿Qué hacer contra el bruxismo?
Para evitar la pérdida dental a causa del bruxismo, recomendamos usar una férula de relajación oclusal que reparta las fuerzas masticatorias y relaje la musculatura. Además, en casos de bruxismo agudo, junto con el uso de la férula, también recomendamos una serie de ejercicios de fisioterapia para reducir la tensión muscular y mejorar la movilidad mandibular.
4. Causas menores
Causas menos frecuentes son los traumatismos o accidentes que llevan a la avulsión y perdida de un diente. Si practicas deportes de riesgo (hockey, rugbi, etc..) recomendamos el uso de un protector bucal para evitar impactos que pueden llevar a la pérdida de un incisivo.