El bruxismo es un hábito inconsciente que consiste en el apretamiento o rechinamiento de los dientes. Y aunque es principalmente un hábito nocturno, algunos pacientes lo manifiestan también durante el día. Hoy más de un 60% de españoles sufren bruxismo en alguna de sus variedades. Por lo tanto, podemos decir que el bruxismo es una dolencia extendida entre la sociedad. En ocasiones, el bruxismo puede ser leve e incluso no requerir tratamiento, pero frecuentemente es suficientemente grave como para ocasionar complicaciones.
Pero, ¿qué es el bruxismo exactamente?
El bruxismo genera unas fuerzas importantes e intensas sobre los dientes, las encías, la musculatura de la masticación y la articulación temporomandibular o ATM. Unas fuerzas, que en ocasiones pueden ser de 5 a 10 veces más intensas que las masticatorias y pueden generar problemas
¿Qué complicaciones provoca el bruxismo?
El desgaste dental es uno de los de sus principales efectos sobre nuestros dientes, pero también puede causar más problemas como son el dolor dental, dolor al masticar, dolor de cabeza, fracturas o fisuras dentales, el agravamiento de las enfermedades de la encía (periodontitis), limitaciones en la apertura bucal y/o la artrosis de la articulación temporomandibular, que resultan de difícil tratamiento si no se enfocan desde la causa primaria de estos, que es el bruxismo.
¿Cómo combatir el bruxismo?
Muchos de nuestros pacientes nos preguntan cuáles son las causas del bruxismo y la respuesta es muy simple: el estrés. El ritmo de vida actual, en la que parece que no hay tiempo para todo, genera grandes dosis de estrés que el cuerpo debe liberar de alguna manera, siendo el bruxismo una de ellas. ¿Qué podemos hacer para controlar el bruxismo? Aunque la respuesta no es fácil, aprender a luchar contra el estrés e incluso utilizar técnicas de relajación o control supone uno de los mejores tratamientos posibles para evitar la dolencia.
Una de las técnicas que se han mostrado más eficaces es la Atención Plena o Mindfulness. Se trata de una práctica en la que tomamos conciencia de nuestras distintas facetas en el momento presente. Así, podemos aprender a ser conscientes de cómo nos movemos, cómo nos sentimos y cómo reaccionamos ante cada situación.
Normalmente, solo una pequeña parte de nosotros presta atención a las actividades cotidianas, mientras que la mente y los pensamientos se desvían hacia otro lado. Eso, que podría denominarse “llevar el piloto automático”, nos priva de la de muchos detalles de nuestra experiencia. Cultivando la Atención Plena podemos aprender a tener mucha más sensibilidad permanentemente y ser conscientes de lo que hacemos en todo momento. Ahí reside la ventaja de esta práctica a la hora de controlar el bruxismo y así evitar el desgaste dental.
¿Qué actividades se recomiendan para tratar el bruxismo?
Puedes realizar estas actividades para controlar el estrés en tu día a día:
- Intenta buscar varios momentos al día para relajarte.
- Busca actividades relajantes como el yoga o la meditación.
- Apúntate a actividades deportivas que te permitan desconectar de los pensamientos negativos.
- Explora la posibilidad de participar en talleres de meditación.
- En casos más graves podría ser recomendable acudir a un psicólogo que te enseñe técnicas de control de la ansiedad o el estrés.
Todas estas actividades pueden ayudarte a disminuir el estrés y por consiguiente el bruxismo. No obstante, recuerda que, aunque ayuden a controlar parcial o totalmente el bruxismo, los odontólogos recomendamos que utilices un dispositivo hecho a medida llamado férula oclusal. Este dispositivo de acrílico se coloca entre los dientes para que al dormir las fuerzas de apretamiento se minimicen y que, por lo tanto, las consecuencias del bruxismo en los dientes, las encías, la musculatura o la articulación temporomandibular desaparezcan o se reduzcan.
Cuando el bruxismo ya ha generado síntomas como el dolor, junto con el uso de la férula, también se recomienda una serie de ejercicios de fisioterapia con la intención de reducir la tensión muscular y mejorar la movilidad mandibular. Si crees que puede sufrir bruxismo, te aconsejamos que acudas a un odontólogo para que evalué tu caso y te recomiende la férula oclusal más adecuada. De lo contrario, puedes experimentar algunos de los signos mencionados anteriormente.